Liliana es una arqueóloga que está muy apegada a su profesión. Se entrega a la investigación en cuerpo y alma; para ella lo más importante es estar continuamente en contacto con hallazgos arqueológicos descubriendo mil objetos del pasado que puedan estar esperando a que alguien los saque a la luz. Ha nacido para cumplir objetivos que ella misma desconoce. Se topa con el gran misterio de una pirámide que la descoloca psicológicamente durante un tiempo. Ella lucha por querer que todo sea normal, pero esa voz que aparece en sus sueños llega para despertarla, no solo del sueño, también de la realidad que vive.

Cuando Liliana conoce la verdad, se da cuenta de que no pertenece a la vida que está llevando; decide ir en busca de su identidad. Con su pena escondida, se propone ser ella ubicada en su esencia...

«Existe una abismal diferencia entre lo que vemos y lo que suponemos que es».