Pamplonica por excelencia. He crecido en el núcleo de una familia trabajadora, viendo a mi abuelo labrar la huerta y degustando los potajes de mi abuela. Ellos junto a mi madre han sido referentes en mi vida, apostando siempre por dejar que fuésemos nosotros mismos.
Soy la mayor de tres hermanos, a todos nos han educado con los mismos valores, son los que hoy en día transmito a mi hija. Sí, soy mamá de una pequeña alocada, curiosa, llena de preguntas, sincera y cariñosa. Aprendo cada día de ella, sus reflexiones no dejan de sorprenderme. Mi fiel reflejo.
Amante de mi ciudad y sus fiestas. De las escapadas a cualquier rincón del mundo, duren horas o días. Vivir es maravilloso siempre que te rodeas de buena gente, la familia elegida. A día de hoy, no pido permiso, prefiero pedir perdón.
Si algo llevo aprendido es: No hay que querer mucho, hay que querer mejor. Esta soy yo en los ojos de mi hermano Amador.